Tú brújula para el 2019

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Bello texto del libro de Robin Sharma, “El Monje que vendió su Ferrari”

 

Cuando te inspira un objetivo importante, un proyecto extraordinario, todos tus pensamientos rompen sus ataduras; tu mente supera los límites, tu conciencia se expande en todas direcciones y tú te ves en un mundo nuevo y maravilloso. Las fuerzas, facultades y talentos ocultos cobran vida, y descubres que eres una persona mejor de lo que habías soñado ser

Serena tu mente, acepta la emoción que tienes aquí y ahora, siente cómo se encuentra tu cuerpo físico.

Observa todo el amor que albergas en tu interior. Eleva tu vibración.

Permite que en tu mente aparezca la película del 2018. ¿Qué grandes éxitos has conseguido este año?

Pausa la lectura. Visualiza con todo lujo de detalles los acontecimientos más importantes del año que has dejado atrás.

Regálate un abrazo y celebra tus éxitos con amor.

 

Te invito a jugar con una poderosa práctica de magia blanca de cara al próximo año, una brújula que de sentido a tu vida.

 

PRÁCTICA DE MAGIA NIVEL II

Los requisitos para marcar un objetivo son los siguientes:

Tangible. Que se pueda percibir de manera clara y precisa. Por ejemplo un número.

Afirmativo. Según la PNL, el cerebro no entiende de negociaciones ni el universo de negación. Escribe tu objetivo en afirmativo y tiempo presente. Pon el foco en lo que quieres.

Realista y retador. Realista en el tiempo pero retador.

Ganancia. Hazte las siguientes preguntas: ¿Qué pasará si lo consigo?, ¿Qué no pasará si no lo consigo?, ¿Qué no pasará si si lo consigo? Y por último, ¿Estoy dispuesto a pagar el precio?

Evidencia. Debes creer para poder ver. Visualiza tu objetivo cumplido y agradece por ello cada día.

Tiempo. Todo objetivo necesita ser bajado a tierra, ponle fecha.

 

Una práctica de magia consiste en hacer visible lo invisible.

En creer para poder crear.

Primero lo ves en tu mente y después lo traes al plano físico.

No todo el mundo está preparado para ello, quizás sea el momento de confiar en lo invisible y atreverse a transformar tu vida.

 

¿Qué objetivo te marcarías a nivel personal para el año que viene?

¿Para qué te lo has marcado?

¿Qué objetivo te gustaría ponerte a nivel social en el 2019?

¿Para qué?

Y por último,

¿Qué te encantaría conseguir a nivel profesional el próximo año?

¿Para qué?

 

Estas frases o imágenes que han aparecido en tu mente, ¿tienen significado para ti? ¿Te acercan a tu misión de vida?

¿Cuál es la auténtica fuente de la prosperidad? ¿Qué tienen en común personas como Anita Roddick o Warren Buffett? La respuesta está en una particular forma de mirar el mundo, en una mentalidad que reconoce en la abundancia y en la generosidad los puntos de partida para crear la auténtica bonanza.

Tú también puedes conseguir todo lo que te propongas, sólo tienes que hacer magia, poner tu atención en lo que tienes con gratitud, y en lo que quieres como si ya lo estuvieses disfrutando.

El otro día leí un estudio en el que decía que de los 17-30 años la gente se pasa 5 horas al día en las redes sociales. No lo juzgo. No es ni bueno ni malo, pero es interesante observar dónde estás poniendo tu foco, quizás esto te lleve a plantearte por qué no has conseguido tus objetivos vitales.

Cuando pones tu atención en tus objetivos anuales, la metáfora que veo es que en lugar de ir en burro vas en ave.

De ahí que haya gente que siempre consigue lo que quiere y otros simplemente pasan por la vida de puntillas.

El que no sabe a dónde va, cualquier autobús le sirve. Vivimos en un mundo en el que la gente no consigue lo que quiere porque no se para a pensar en lo que quiere, de hecho, el ser humano pasa más horas pensando en lo que no quiere que en lo que desea.

Para que tus objetivos se cumplan, deberás elaborar un plan de acción, pues del dicho al hecho hay un trecho.

Este escrito representa una semilla, a partir de ahora, dependerá de ti regarlo cada día, visualizarlo como realizado, con plena confianza, gratitud y amor incondicional.

Llegar más allá de donde estás es realmente importante. 

El bienestar no puede existir solo en tu propia cabeza. El bienestar es una combinación entre sentirse bien y realmente tener una vida con sentido, buenas relaciones y autorrealización.

Que tus objetivos te lleven a ser mejor persona y dejar este mundo un poquito mejor de lo que te encontraste.

Mediante la activación de una mentalidad expansiva, tolerante y creativa, los sentimientos positivos maximizan los beneficios sociales, intelectuales y físicos que buscamos.

Feliz semana y feliz vida cargada de sentido, de significado.

Namaste.

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